Sudor rojo

Acaricié tu piel áspera,

medí tu temperatura hasta sentir fiebre,

noté el flechazo de cupido cuando estabas rodeado de semejantes,

sudé tinta roja hasta conseguirte, hasta tenerte.

Trabajo grande, fotógrafa pequeña

Fruto de la casualidad, creo, tocaron al timbre de mi profesionalidad. Todavía no entiendo muy bien cómo.

Mi tercer ojo se ha mantenido en guardia durante 3 dias "full time".

Entendí mediante un exhaustivo repaso del mister que quizá soy demasiado pequeña para tal cámara y semejante trabajo...

Ayer, saqué del armario la chaqueta grande y, ataviada con toda la voluntad y el mejor equipo de optimismo, marché a crecer.

No hay trabajo que se resista a la ilusión y el buen hacer.

Soy pequeña pero puedo ser grande aunque sólo sea con una cámara y una chaqueta.

¡Soy la fotógrafa de la selección de Chile!

Sí quiero.

¿Y la llave?

A través de la cerradura vi, escuché, sentí y guardé.

¡Guardemos la llave bajo la maceta!

Punto de equilibrio

El punto de equilibrio equivale a ventas=costes en los negocios, donde es muy importante contar con un margen de seguridad (?).

Desde el punto de vista químico el punto de equilibrio es un estado del sistema en el que no se observan cambios a medida que transcurre el tiempo. Se puede ver alterado por un cambio de temperatura y/o concentración (!).

Para los psicólogos no existe una definición absoluta, simplemente aconsejan hacer yoga y/o meditación (¿¡!?)

Desde el punto de vista del dueño de una mascota porculera, el punto de equilibrio es una putada, puede joderte la tele, es importante alterar el margen de seguridad, sacar el bol de croquetas para desconcentrar y si es necesario recurrir a la escoba para que el animal cambie el estado "zen" por el estado "miaaaaaau", que es lo suyo.

A los vivos

Me susurras al oído a través de los recuedos.

Hemos compartido tantas vivencias que no resulta complicado ponerte expresión, voz.

En mi día a día sigo contando con tu cariño y tu saber.

Te escucho y te veo en otra dimensión.

Para mí SIEMPRE ESTARÁS VIVO.

A mis abuelos,

A mi madrina María Ferrer,

A mi tía Margarita Marí,

A mis amigos Álex y Joan,

A los gatos de nuestra infancia,

A los amigos y familiares de mis amigos y familiares,

A todos los seres queridos de todos.

A MI PADRE.